CAPITAL CULTURAL Y CULINARIA DE AUSTRIA
Palacetes
majestuosos, callejuelas escondidas, románticos patios y recónditas plazoletas,
calles empedradas y tejados rojizos: en toda la ciudad se hace patente la
presencia de los constructores italianos que vivieron y trabajaron en esta
ciudad durante varios siglos.
El
casco antiguo mejor conservado de Centroeuropa tiene edificios de todas las
épocas, desde el gótico al Renacimiento o el barroco. La ciudad, cosmopolita y
vibrante, es el punto de encuentro de muchas culturas europeas diferentes. Y
durante la época estival, se convierte en un auténtico escenario. Los
entendidos aprecian Graz por su belleza, temperamento mediterráneo, calidez,
ganas de vivir y encanto.
Graz
presentó en el año 2009 su candidatura a Ciudad del Diseño ante la UNESCO con el objetivo de
formar parte de la Red
de Ciudades Creativas a la que también pertenecen Berlín, Buenos Aires, Kobe,
Montreal, Nagoya o Shenzhen. A primera vista parece algo extraño para una
ciudad relativamente pequeña; pero, como es evidente, en cuestión de diseño no
se trata de cantidad sino de calidad, lo decisivo no es su tamaño sino el
ambiente en el que puede surgir el diseño. Pequeñas unidades, relaciones
personales y una tupida red de contactos con características básicas. Graz es
ahora, Ciudad del Diseño desde marzo de 2011 y forma parte del ámbito
internacional.
Es
de sobra conocido que al verdadero amor se le conquista por el estómago. Por
eso resulta muy recomendable pasar un fin de semana romántico en esta “Capital
culinaria de Austria”. Sus ingredientes para el éxito: anfitriones cordiales,
excelentes cocineros y productos frescos regionales.
EL ENCANTO DEL CASCO ANTIGUO
En
ningún sitio puede perderse el visitante tan placenteramente sin extraviarse:
basta con ir sencillamente de paseo y dejarse sorprender. Detrás de cada
esquina hay algo nuevo que descubrir: callejuelas recónditas y románticos
patios interiores, fachadas artísticas y suntuosos edificios. Graz tiene
infinidad de estilos uno al lado del otro y en común forman un núcleo urbano
extraordinariamente conservado
Esta
densa atmósfera del casco antiguo ha sido un importante componente en la gran
resonancia positiva e internacional que logró conseguir que esta ciudad fuera
destacada como la Capital Cultural
de Europa en 2003.
En
un paseo por el casco antiguo, cabe destacar:
PATIO
LANDHAUSHOF. Especialmente el patio interior del Landhaus con sus pórticos se
considera como una obra maestra del Renacimiento italiano. Tras las ventanas de
arco de medio punto está la sala de sesiones en la que se reúne el Parlamento
del Gobierno regional de Land.
ARSENAL
LANDESZEUGHAUS. Se encuentra justo al lado del Landhaus y si en sus días fue la
armería más importante de Austria, en la actualidad está considerada como la
más importante colección de armas históricas del mundo, con más de 30.000
fantásticos objetos expuestos.
PATIOS
GENERALIHOF Y HERZOGHOF. Graz es famosa por sus románticos patios interiores,
algunos de los cuales descubrirá el visitante en este recorrido como, por
ejemplo, el patio Generalihof (entrada por la calle Herrengasse nº 9) y un poco
más adelante se encuentra la casa pintada con frescos “Gemalte Haus”. El pintor
barroco Johann Mayer pintó en 1742 los frescos de la fachada que representan a
dioses de la mitología griega. El patio interior es conocido por el nombre de
Herzoghof.
HAUPTPLATZ
(PLAZA MAYOR) Y RATHAUS (AYUNTAMIENTO)
La Hauptplatz
y el ayuntamiento son el corazón y punto central de la ciudad. En el centro de
la plaza Hauptplatz está la fuente Erzherzog-Johann Brunnen construida en 1878;
es una reminiscencia del archiduque Johann como “príncipe de Estiria”. El
representativo ayuntamiento con cúpula, reloj y varias torres cuadradas domina
la plaza mayor de Graz desde el siglo XIX.
CASA
LUEGG
PATIO
DE LA ORDEN TEUTÓNICA
DEUTSCHER RITTERORDEN. Sin duda merece la pena ver el patio con sus pórticos
góticos de la Orden Teutónica,
empedrado por completo con “Murnockerin” (entrada por la calle Sporgasse nº 22).
IGLESIA
INTERIOR STUIEGENKIRCHE. Se trata de la iglesia parroquial más antigua de Graz,
documentada por primera vez en 1343. Esta iglesia sita en el núcleo histórico
del centro de la ciudad, es conocida ante todo como iglesia de estudiantes. Se
encuentra a los pies de la ladera sur de la colina Schlossberg y queda oculta
detrás de los imponentes muros de un antiguo convento de agustinos.
PALAIS
SAURAU. Pankraz von
Windischgratz edificó en el año 1566 un imponente palacio de cuatro alas junto
a la muralla medieval de la ciudad que aún había y que en la actualidad se
conoce como Palais Saurau. Bajo su tejado se encuentra la legendaria figura de
un guerrero turco.
PANADERIA PALATINA HOFBACKEREI EDEGGER
TAX. Bajando por la calle Sporgasse y girando a la izquierda en la calle
Hofgasse se llega al magnífico portal de madera de una tienda coronado con un
águila bicéfala dorada: es la panadería Hofbackerei Edegger Taxen, en la cual
hay delicias de tiempos imperiales aguardando a ser probadas, como, por
ejemplo, “Sissibusserl” o “Kaiserzwieback”.
A destacar en este paseo por el casco
antiguo de Graz, el castillo Burg, el jardín Burggarten, el parque Stadtpark,
la catedral Dom, el Mausoleo que hizo construir el emperador Ferdinand II o el
Seminario Sacerdotal, así como los alrededores de las plazas Mehlplatz y
Farberplatz, la Ópera y el Mercado Kaiser, donde se recomienda llevarse como
souvenir el típico aceite puro de calabaza, conocido como “oro negro de
Estiria”.
BARRIOS
HISTÓRICOS Y MODERNOS
Impresionante contraste entre la parte
tradicional y la moderna de Graz. El proyecto “Capital Cultural de Europa” dejó
aquí sus huellas más evidentes.
En una orilla del río hay callejones
estrechos que proyectan sus sombras refrescantes durante todo el día, tiendas
pequeñas, una mezcla de los más diferentes aromas, plazas inundadas por la luz
del sol, un rumor de voces policromas y, sobre todo, gentes de todas las
edades.
A unos pocos pasos, cruzando el río
Mur que divide la ciudad, nos encontramos con un gran contraste: desde 2003,
vive aquí el futuro, el extravagante centro de arte Kunsthaus que se ha
acomodado entre las antiguas casas de la vecindad y evidentemente se encuentra
a gusto. Los habitantes de Graz aman a este monstruo por su singular belleza y
ya lo consideran como el segundo monumento característico de la ciudad. Una
concha que flota sobre el río une los dos lados de la ciudad: la isla en el río
Mur.
En esta parte del recorrido cabe
mencionar el barrio Franziskanerviertel, la Iglesia
Franziskanerkirche y Convento Franciscano, el paseo
Mur-Promenade, el centro de arte Kunsthaus Graz, la plaza Mariahilferplatz, la
isla Murinsel, el Palais Attems, la calle Sackstrasse, el Museo Graz, el Museo
en el Palacio y finalmente la plaza Schlossbergplatz.
Existe además, una tercera ruta, la
que lleva a la colina de Schlossberg, desde donde se puede disfrutar de
magníficas panorámicas sobre un océano de tejados rojos del casco antiguo de
Graz. ¿Qué otra ciudad puede vanagloriarse de tener en el centro del casco
antiguo una maravillosa colina con bosques, un lugar excepcional donde también
se puede pasear? Es la colina Schlossberg. Atrae en primavera con su fresco
verdor y los primeros rayos de sol; en verano con las sombras que dan los
árboles y con las representaciones de eventos al aire libre; en otoño por la
suntuosidad de sus colores y en invierno, sí también en invierno, porque es un
lugar donde escapar del gris que envuelve a la ciudad.
Pero Graz es más, mucho más de lo que
el visitante puede llegar a imaginar, no en balde existen destinos periféricos
que valen realmente la pena, tales como el Palacio Schloss Eggenberg, la Basílica Mariatrost,
las Universidades, el Jardín Botánico, los Invernaderos, la Iglesia Leechkirche,
las ruinas del Castillo de Gosting o el Monte Calvario.
Graz, ciudad residencial del
emperador, joya del renacimiento, ciudad de la ciencia, de la arquitectura
moderna y auténtica capital cultural… Más de 900 años de historia aún viva en
la segunda ciudad más grande de Austria: en los paseos pueden descubrirse
muchos testimonios de su agitado pasado, muchas referencias del presente y
alguna que otra visión del futuro. Hay que recalcar que, muy posiblemente no
existe otra ciudad en el mundo que tenga una arquitectura tan extraordinaria,
con todos los estilos de construcción en tan poco espacio, comprendiendo desde la
Edad Media hasta el siglo XXI.
Sin lugar a ningún género de dudas,
cabe hacer constar que merece la pena una escapada hasta este bello y acogedor
rincón austriaco.
Un flirteo con Graz se puede convertir
en una larga relación.
(Ver
interesante colección gráfica de este reportaje en GALERIA DE FOTOS)