WYOMING

RECORDANDO AL LEGENDARIO FAR WEST


La matrícula de los vehículos de Wyoming está decorada con un vaquero montado en un caballo; resulta difícil encontrar un símbolo más apropiado para un estado. La tradición del Viejo Oeste aún está viva en los rodeos de Wyoming, en los ranchos turísticos y en las vastas áreas de pastizales sin fin, y es posible que el visitante vea a algún vaquero conducir sus reses montado a caballo.

En Wyoming se hallan también dos de los parques nacionales más antiguos y populares: Yellowstone (del que ya nos ocupamos en un número anterior de TIEMPO DE VIAJAR) y el Grand Teton. Miles de personas vienen a este estado cada año para visitar estos parques, por su magnífico paisaje de montañas y bosques, géiseres, cascadas y abundante vida salvaje.

Por Wyoming pasaron las mismas rutas principales de migración hacia el Oeste que cruzaron el estado vecino de Nebraska, además de las rutas de cazadores de pieles, los exploradores y los misioneros. Las grandes confrontaciones del ejército y los indios, las guerras por los pastizales y las historias de forajidos y asaltantes de trenes, enriquecen el pintoresco pasado de este estado. En Wyoming aún en la actualidad se encuentran por doquier muchos vestigios de todo aquello.

CLIMA, GEOGRAFIA Y LOCALIZACIÓN

La elevación media de Wyoming ocupa el segundo lugar entre las mayores de Estados Unidos: 1860 metros sobre el nivel del mar. El clima es semi-árido y, a causa de la altitud, relativamente frío. La mayor parte del verano, el promedio de las temperaturas altas (en julio) oscila entre 29º y 35ºC.

El nombre de Wyoming proviene de una palabra india que significa “el final de las grandes llanuras”. Aquí hay altas planicies cubiertas de pastos e interrumpidas por once cadenas de las Montañas Rocosas.

La diversión al aire libre, en medio del espectacular paisaje, es la marca distintiva de este estado. La equitación encabeza la lista, ya sea que pase el viajero varios días sobre una silla de montar, o bien efectuando un paseo con guía por las montañas, o que participe en un rodeo para aficionados.

Los parques y bosques nacionales son centros favoritos para el excursionismo, el montañismo y los campamentos. Hay truchas en la mayoría de los fríos lagos y arroyos cristalinos. Jackson Hole y los parques nacionales atraen a esquiadores y conductores de “nievemóvil”, y a los fotógrafos que vienen a captar la vida salvaje en un ambiente nevado.

JACKSON HOLE Y EL P.N. GRAND TETON

El Parque Nacional Grand Teton es uno de los más espectaculares y bellos de la nación. La accidentada cordillera Teton se eleva abruptamente a más de 2100 metros sobre los brillantes lagos, los bosques de pinos y las praderas montañosas de Jackson Hole (Hole significa hoyo y era un vocablo que usaban los cazadores de pieles para referirse a “un valle en las montañas”). La mayoría de las actividades y muchas de las magníficas vistas del parque se encuentran a lo largo de la carretera principal del Parque Teton, que bordea los tres lagos centrales: Jenny, String y Jackson. La pesca de la trucha en estos lagos es excelente y varias empresas ofrecen paseos por las aguas del río Snake, que atraviesa el parque.

Varias veredas montañosas muy concurridas, conducen hasta Tetons, donde el visitante puede emprender una excursión o acampar en la soledad alpina. El parque es un importante refugio de la fauna salvaje, en especial de grandes mamíferos y del águila calva, el cisne trompetero, el pelícano blanco y otras aves de gran tamaño.

La vecina ciudad de Jackson es un centro turístico importante tanto en verano como en invierno. Su atmósfera al estilo del Oeste está realzada por grandes arcos fabricados con astas de alce, además de aceras de madera, edificios con falsa fachada y pintorescas cantinas (los bancos de una de ellas son sillas de montar plateadas) y buen numero de excelentes galerías especializadas en arte del Oeste.

Varios ranchos turísticos de la región brindan las emociones del Oeste en verano y organizan paseos en “nievemóvil” y actividades a campo a través en invierno. Tres importantes centros para esquiar ofrecen sus teleféricos o funiculares, para que el visitante contemple el paisaje en el verano. En el Refugio Nacional de los Alces se pueden observar las grandes manadas de estos animales en los Estados Unidos. En invierno, trineos tirados por caballos llevan al visitante a un paseo entre grandes animales. La única subasta pública de astas de alce se realiza en Jackson Town Square en el mes de mayo.

Los alces mudan las astas mientras invernan en este lugar, y los Boy Scouts se encargan de recogerlas. Las ganancias obtenidas son en beneficio del refugio.

LA CARRETERA OESTE

Con rumbo al Oeste, desde Nebraska, las rutas de Oregón y de los mormones, el ferrocarril transcontinental, los alambres del telégrafo y el Pony Express seguían generalmente el trayecto de lo que hoy es la Carretera Interestatal 80, a través del sur de Wyoming. Vale la pena hacer algunas escalas a lo largo de esta ruta.

Cheyenne es la capital del estado de Wyoming, cuenta con una población aproximada de 100.000 habitantes, es la sede del condado de Laramie y la ciudad más grande del estado. Fue fundada en 1867 y renombrada por el presidente Ulysses S. Grant. Tiene un área de 57,9 kilómetros cuadrados y una densidad poblacional de 969,6 habitantes por km/cuadrado.

Creció como una ciudad ganadera y ferroviaria, y recobra algo del Viejo Oeste en los Días de la Frontera de Cheyenne, que se celebran durante la última semana del mes de julio. En ella se organiza uno de los principales rodeos para vaqueros profesionales en la región.

El Museo de los Días de la Frontera del Viejo Oeste, en Cheyenne, relata la historia de la comarca por medio de exh9ibiciones donde aparecen indios norteamericanos, vaqueros y ferrocarriles. El Museo Estatal de Wyoming tiene colecciones, igual de valiosas, de recuerdos de vaqueros, indios, tramperos y pioneros. Asimismo, en el Parque Holliday se puede visitar la locomotora a vapor más grande del mundo.

Entre Cheyenne y Laramie, en el punto más elevado de la primera vía transcontinental (la actual Unión Pacific), a 2634 metros, hay una estatua del presidente Abraham Lincoln (porque él autorizó la construcción de esa línea ferroviaria).

Esta en una región de praderas altas, donde parece que el horizonte se extiende hasta el infinito. Una desviación escénica, al oeste de Laramie (la carretera 130 de Wyoming) conduce a través de las montañas nevadas de la Cordillera de Medicine Bow, de 3650 metros de altura, pasando junto a bellísimos lagos en las montañas y praderas alpinas.

Al sur de Rock Springs, el Área Recreativa Nacional Flaming George contiene en sus límites el lago Flaming George, un embalse del río Green, que tiene casi 150 kilómetros de largo y es notable por su abundancia de truchas para la pesca. La barranca ostenta formaciones de rocas multicolores, montes cuyas cimas son notablemente planas y cañones escarpados. Las construcciones restauradas, el museo y las exhibiciones interpretativas del Sitio Histórico Estatal Fort Bridger narran la crónica de este histórico bastión comercial, que fue construido por el montañés Jim Bridger en 1842.

CODY Y EL LEGADO DE BUFFALO BILL

Para los entusiastas del arte y la historia del Oeste, el Centro Histórico de Buffalo Bill en Cody, Wyoming es uno de los lugares más interesantes del país. El centro está formado por cuatro museos, cada uno de los cuales se cuenta entre los mejores del mundo, en su respectivo género.

El Museo Buffalo Bill guarda una vasta colección de recuerdos personales a históricos del famoso hombre espectáculo del Oeste. En la Galería Whitney de Arte Occidental se exponen pinturas y esculturas originales de Charles Russell, Fraderick Remington, Albert Bierstadt, Edward Moran y otros artistas famosos del Oeste.

El Museo de los Indios de las Llanuras contiene una extensa colección de utensilios que pertenecieron a las tribus Sioux, Shoshone, Crow, Cheyenne y Arapahoe, donde figuran armas, herramientas y ropa. El Museo de Armas de Fuego de Cody (inaugurado en 1991) posee la colección de armas de fuego estadounidense más grande del mundo.

Cuando esté en Cody el visitante no debe perderse el viejo Hotel Irma, construido por Buffalo Bill, que ha sido centro de reunión de la localidad durante casi un siglo.

La Reina Victoria obsequió a Buffalo Bill con su espacioso mueble de gabinete, con un gran espejo posterior, en prueba de gratitud por una función que él ofreció en Londres.

Old Trail Town es una serie de edificios históricos, entre ellos la cabaña que en un tiempo ocuparon los legendarios forajidos Butch Cassidy y Sundance Kid.

SHOSHONES Y ARAPAHOES

Los shoshones fueron un grupo de tribus de lengua uto-azteca de la subfamilia númica, su nombre proviene de shishinoats hitaneo o serpiente-víbora, se dividían en cuatro grupos, pero uno de ellos, los comanches, más tarde formaron una tribu aparte.

Los shoshones occidentales, en Nevada, no tenían caballos y eran llamados diggers (cavadores),

Los shoshones del norte poseían caballos y vivían en el norte de Utah y el sur de Idaho.

Los windriver vivían en Wyoming.

Los shoshones del sur estaban localizados en el desierto de Mojave (California).

Los shoshones lemhi, en el centro de Idaho.

Los shoshones bruneau, en Oregón y oeste de Idaho.

Actualmente están divididos en reservas situadas en Wyoming junto con los arapahoes, Idaho y Utah.

A comienzos del siglo XIX había posiblemente 2.500 shoshones, unos 10.000 occidentales y centrales y 7.000 comanches, pero en 1909 quedaron reducidos a cuatro grupos que sumaban 3.250 individuos.

Por lo que respecta a los arapahoes o “pueblo del bisonte, vivió históricamente en el este de las Grandes Llanuras de los actuales estados de Wyoming y Colorado, fueron fuertes aliados de las tribus cheyennes y ligeramente alineados con los sioux. Ellos fueron los auténticos dueños de estas tierras en el pasado, aún hoy pueden observarse a los descendientes de los auténticos habitantes de esta región, quienes en su mayoría, a pesar de haber evolucionado en las reservas en las que se hallan confinados, siguen manteniendo algunas de sus costumbres más ancestrales.

Viajar a Wyoming es como hacerlo a un rincón al más puro estilo del Far West.


(Ver interesante colección gráfica de este reportaje en GALERIA DE FOTOS)