LONDRES: SIGUIENDO LOS PASOS DE LOS BEATLES



A lo largo de los últimos años ha surgido en la capital londinense un turismo realmente singular. No se trata de los habituales viajeros ansiosos por contemplar el cambio de la guardia en Buckingham Palace, pasear por Hyde Park, darse una vuelta por Harrod´s  o bien fotografiarse junto al Big Ben. Los nuevos turistas son auténticos mitómanos ávidos por seguir las huellas de los inolvidables Beatles, el cuarteto de Liverpool que irrumpió en el mundo musical en la década de los sesenta y terminó por convertirse en un fenómeno sociológico.
De igual forma a como Memphis (USA) es punto de cita para los incondicionales de Elvis o los acérrimos seguidores de Jim Morrison desfilan ante su tumba en el cementerio francés de Père Lachaise, Londres es lugar de peregrinaje para quienes pretenden observar de cerca los lugares que un día, ya lejano, frecuentaron los  inigualables John, Paul, George y Ringo.
Son tantos y tan diversos los enclaves de ineludible visita (edificios, hoteles, tiendas, bares, estudio de grabación, etc. ), que vale la pena establecer una serie de rutas a seguir a través de los distintos barrios del viejo Londres, acompañándose de una buena guía (recomendable la biografía The Beatles de Andrés López, editada por Cátedra). Estas rutas muy bien pueden tener su inicio al otro lado del Támesis, en el pequeño teatro de Old Vic situado en el barrio de Lambeth (metro Waterloo de las líneas Northern y Bakerloo) y a escasa distancia del National Theatre y el National Film Theatre. Fue aquí, en Old Vic, donde en junio de 1968 se estrenó la adaptación teatral del libro de John Lennon In His Own Write y a la vez se hizo pública su relación con Yoko Ono, con la que asistió a la ceremonia.
En el barrio de Covent Garden y más concretamente en Wellington St. (metro Aldwych de la línea Picadilly o Temple de la línea District) se ubica el Lyceum Ballroom donde Lennon actuó en diciembre del 69 en compañía de Yoko y la Plastic Ono Band en un concierto que fue grabado y se organizó a beneficio de Unicef. En aquella ocasión la Plastic Ono Band estuvo integrada nada menos que por George Harrison, Eric Clapton, Billy Preston, Keith Moon y Jim Gordon, entre otros.
Sin abandonar el mismo barrio, aunque más cerca de la estación de Charing Cross, fue en el hotel Savoy donde en septiembre de 1963 los Beatles recogieron el premio concedido por el Club Variety como mejor grupo vocal de aquel año.
En el teatro Saville de la Shaftesbury Avenue (metro Leicester Square de las líneas Northern y Picadilly), el grupo rodó en noviembre de 1968 parte de la escena final del tema Hello Goodbye, que aparecería en su película Magical Mystery Tour.
Por su parte, Picadilly Circus, limítrofe entre el Soho y St. James´s, concentra tres lugares realmente importantes para los más incondicionales.
El London Pavilion, que en la actualidad acoge el sorprendente museo Rock Circus, un espacio  temático donde se recorre la historia del rock a través de  figuras de cera que reproducen fielmente a las mas famosas estrellas (ocupando los Beatles un espacio preferente), en julio de 1964 fue escenario del estreno de Hard Day´s Night y meses después de Help.
En el Teatro Príncipe de Gales (noviembre de 1963), participando en el -Royal Command Performance- los Beatles realizaron la más importante de sus actuaciones hasta entonces. Aquella noche sonaron temas como Twist and shout y She loves you, entre otros, de su excepcional repertorio, los cuales entusiasmaron a los presentes y sirvieron para ganarse el agrado y simpatía de la realeza británica. Tradicionalmente aferrada a su pasado conservador, Gran Bretaña comenzó a partir de entonces a verse sacudida por el fenómeno beatle.
Siguiendo el recorrido por el Soho (metro Oxford Circus de la línea Central y Bakerloo) hay que destacar, sin duda alguna, el Palladium, uno de los lugares más visitados y posiblemente donde se inició la auténtica beatlemanía, dados sus éxitos en el festival Val Parnell´s Sunday Night, que acostumbraba a reunir a los artistas más populares del país, y al concierto que realizaron un a½o después, en mayo del 64.
En el número 10 de Kingly Street se halla situado Bag of Nails (en la actualidad se denomina Miranda Club) donde Paul conoció a Linda, la fotógrafa con la que acabaría casándose en 1969 y precisamente el lugar en el que Jimi Hendrix realizó su primera actuación británica. Justo al lado, en la tienda Beatles for sale, los fetichistas tienen la oportunidad de comprar toda clase de material relacionado con el grupo, alguno original de los años sesenta, auténticas piezas de coleccionista a precios razonables. En esta tienda también informan sobre los paseos en autocar que se organizan a diario para visitar algunos de los lugares de la ciudad relacionados con los Beatles.

En el distrito de Mayfair, y más concretamente en el número 3 de Savile Row, se ubica el viejo edificio victoriano que fue sede de la Apple Corporation creada, sin duda, con una filosofía marcadamente altruista. En la azotea del edificio se decidió realizar un concierto para poner punto final a la película Let it be en el mes de enero de 1969: “Estábamos buscando terminar la película en el plazo de dos semanas y al no tener un concierto inmediato nos sugirieron subir al tejado y acabarla  así”, comentó Paul McCartney tiempo después.
Sin salir de Mayfair, en Park Lane, dos hoteles suponen sendos lugares de interés para los seguidores de los Beatles: el Milton, en el que se produjo el encuentro con el Maharishi Mahesh Yogi, y el Dorchester, donde en abril de 1964 John presentó  In his Own Write, realizando así su debut en el mundo literario, muy a pesar del escaso tiempo que le dejaban sus actuaciones con el grupo y el rodaje de A Hard Day´s Night.
Al borde de Hyde Park, en Kensington Garden (metro South Kensington de las líneas Picadilly, Circle y District), el prestigioso Royal Albert Hall, poco menos que una joya arquitectónica y escenario tanto de conciertos de música clásica como de rock en el que los Beatles actuaron en abril y septiembre de 1963. Fue también aquí donde Paul conoció a su primera novia popular, la actriz Jane Asher, y recinto en el cual George Harrison ofreció un concierto en 1992 a beneficio del Partido de la Ley Natural.
En el barrio de Marylebone (metro Baker St. de las líneas Circle, Metropolitan y Jubilee) se encontraba la boutique Apple (94 Baker St. esquina a Paddington) que en los apenas ocho meses en que permaneció abierta fue objeto de muchas polémicas por  el descontrol reinante en la misma, el cual trajo consigo cuantiosas pérdidas económicas.
El propio Ringo Starr llegó a asegurar: “No era la imagen con la que habíamos soñado al principio, vendiendo ropa multicolor, la increíble ropa hippy de los sesenta. Por ello, para sacar algunos beneficios, tuvimos que terminar por vender ropa interior normal y corriente”.
En un piso del número 30 de Montagu Square (propiedad de Ringo) llegaron a residir John y Yoko Ono, y en octubre de 1968 fueron arrestados por tenencia ilícita de estupefacientes. Tras el juicio correspondiente, salieron absueltos después de pagar una multa de 150 libras y 20 guineas.
Siguiendo el recorrido a través de los “santuarios” venerados por los adictos a la beatlemanía llegamos a un punto de obligada peregrinación, por así decirlo. Nos referimos al número 3 de Abbey Road (metro St. John´s Wood de la línea Jubilee), donde se hallan los Estudios EMI en los cuales el cuarteto de Liverpool ensayó y grabó la práctica totalidad de sus canciones. Aún hoy, los nostálgicos que visitan el lugar siguen fotografiándose en el popular paso de peatones que fue inmortalizado en la portada del álbum Abbey Road.
En el mismo barrio de St. John´s Word, y para ser más exactos en el número 7 de Cavendish Avenue, se halla la primera casa que se compró McCartney y a la que fue a vivir en el otoño de 1966 con su novia Jane Asher y que tiempo después compartió con la que sería su primera esposa, Linda Eastman. Todavía se recuerdan aquellos tiempos  en los que algunas de sus fans solían pasarse días enteros junto a la verja de la entrada para poder ver a Paul aunque solo fuese un instante. En cierta ocasión, y dado que las normas de seguridad no eran muy estrictas, la casa fue invadida y algunas de sus incondicionales terminaron por llevarse objetos de escaso valor, aunque considerados por ellas como auténticas reliquias.
Para poner punto final a este recorrido nada mejor que acercarse hasta la estación de ferrocarril de Marylebone (Melcombe St.), donde se rodaron parte de las escenas iniciales de A Hard Day´s Night en 1964, o bien hasta el Hard Rock Café, en el número 150 de Old Park Lane (metro Hyde Park Corner de la línea Picadilly) y allí degustar unas excelentes hamburguesas o carne a la barbacoa, rodeados de enseres y pequeños recuerdos que decoran el recinto, tales como el contrato original entre John Lennon y Paul McCartney para formar la Apple Corporation, varios discos de oro, una de las guitarras de John, algunos de los trajes que vistió el grupo en 1964 y recortes de prensa de principios de los años sesenta donde se recogían las primeras noticias sobre sus éxitos.
Seguir los pasos de los míticos Beatles y visitar algunos lugares emblemáticos, se ha convertido en un objetivo turístico para los admiradores de este grupo que marcó toda una época, pero también puede ser un aliciente adicional e interesante para los  turistas convencionales que gustan de visitar Westminster y el Parlamento, realizar una travesía por el Támesis, acercarse hasta el castillo de Tower Bridge, recorrer Hyde Park o bien acudir a los muchos e importantes museos de la capital británica.
Un recorrido, sin duda, cargado de nostalgia y realmente inolvidable.